Registro Civil ceduló a ciudadano que vivió aislado por 20 años

Un desengaño en su vida privada lo desconectó con el mundo. En los últimos 20 años, no quiso saber  nada de su familia, negocios o propiedades.

Vivió solo, de manera precaria. Sin agua ni luz, alimentándose y trabajando como podía. Se trata del ciudadano Galo Amilcar Morales Cobos, más conocido como  don “Zacarías”, un nombre sacado de la Biblia, libro que lo acompañó en sus largos años de  confinamiento.

“Decidí dejar el orgullo a un lado y admitir que necesito ayuda”, fueron sus palabras. A mi edad me es difícil sobrevivir solo, añadió. Junto con su ángel guardián, el Capitán de  Policía  Patricio Vargas, don Zacarías llegó al Registro Civil matriz en Quito. Quería recuperar “su identidad”.

La tarea no resultó fácil,pero su prodigiosa memoria ayudó mucho. Fue la luz que le permitió reconectarse con la sociedad. Consuelo Obando, especialista en temas de identidad del Registro Civil entrevistó a don Zacarías y poco a poco fue reconstruyendo su pasado, su historia. Uno a uno los datos que constituyen su información personal fueron  contados  de memoria, narrados con precisión.

Luego vino la comprobación documental. Un rastreo complejo por las huellas que en papel fueron dejadas por este ciudadano especial, especial por su educación, por el trato educado y elegante que admiró a más de uno.

Se buscó información en  la base  de datos, en los archivos físicos. Poco a poco aparecieron los documentos. Parecía que ya,que la interrogante sobre su identidad se había develado de manera incontrastable. Pero surgió un problema, un dato falso en una antigua cédula relativo a su estado civil. Aun decía casado a pesar de que años atráshabían inscrito la sentencia de divorcio. Don Zacarías no conoció o no recordó este dato.

Era necesaria una resolución para rectificar la información del ciudadano y hubo que esperar que se evacúe el trámite. Cumplido el plazo nos contactamos con el Capitán Vargas y el lunes 31 de marzo en la tarde se hizo realidad el pequeño gran deseo de don Zacarías, obtener la nueva cédula.

La cédula era como una llave que le permitiría a don Zacarías abrir la puerta para acceder a sus derechos.  En la matriz del Registro Civil en Quito, fue recibido por Cristian Vallejo, Director Provincial de Registro Civil de Pichincha quién  lo guió para que el proceso de cedulación se cumpla sin contratiempos.

Se le tomó sus datos, las huellas, foto, la firma.  Luego de esperar un poco recibió su anhelada cédula de ciudadanía. Don Zacarías se deshizo en agradecimientos, abrazos, apretones de mano y reconocimientos a todos quienes le tendieron una mano. A la Policía Nacional  y sobre todo al Registro Civil. Ambas instituciones de servicio público que orientan su acción hacia el ciudadano.

En el caso de Registro Civil fue un gusto conocer  a un ciudadano único. Le deseamos éxito en su nueva vida y que pueda seguir estrechando manos como las del Registro Civil,que día a día entrega a los ciudadanos un buen servicio para el bien vivir.